
Si tuviera siempre la razón...el corazón sería un desempleado de mi alma.
Si tuviera siempre la razón...posiblemente jamás pudiese callar a mi ego sin sentido.
Si tuviera sempre la razón...me alejaría de tantas personas y vivencias, que tendría que vivir solo conmigo misma y mi razón.
Si tuviera siempre la razón...llenaría y arrastraría un saco lleno de vacío.
Muchas veces no oigo mi razón y sigo adelante, caminando junto a muchas otras razones que se juntan en mi corazón...haciendome saber que la unica razón que hay que defender es la que tiene el corazón para seguir latiendo.